El trastorno del espectro autista (TEA) es un trastorno complejo del neurodesarrollo que afecta significativamente la forma en que las personas se comunican, interactúan socialmente y perciben el mundo que las rodea. No existe una cura para el TEA, pero la terapia ABA es ampliamente reconocida como el enfoque más eficaz para tratar los síntomas del autismo y mejorar la calidad de vida de las personas con TEA. Comprender los signos y síntomas del autismo es esencial para un diagnóstico precoz, lo que permite una intervención oportuna y ayuda a los niños con TEA a prosperar.
En este blog, exploraremos los signos y síntomas clave del autismo en los niños, analizaremos por qué el reconocimiento temprano es fundamental y qué hacer si cree que su hijo tiene un diagnóstico de TEA.
¿Qué es el autismo?
El autismo es un trastorno del espectro, lo que significa que las personas experimentan una amplia gama de síntomas y necesidades de apoyo. No existe una descripción única de lo que es el autismo y hay varias Tipos y niveles de TEA, pero se caracteriza por desafíos persistentes en ciertas áreas fundamentales: la comunicación social, las habilidades lingüísticas, los intereses fijos y los comportamientos repetitivos.
Comprender estas áreas centrales del autismo es esencial para reconocer y apoyar a las personas dentro del espectro. Analicemos los signos y síntomas comunes para comprender mejor cómo se manifiesta el autismo en los niños.
7 signos y síntomas del autismo en niños
Si bien cada niño con trastorno del espectro autista es único, hay algunos signos y síntomas comunes a los que hay que prestar atención. Es importante recordar que es posible que estos signos no estén presentes en todos los niños con autismo y que algunos niños con TEA pueden presentar menos signos. Estas son las señales más comunes del trastorno del espectro autista:
#1 Retraso en el desarrollo del lenguaje
Muchos niños con TEA experimentan retrasos en el desarrollo del lenguaje. Es posible que empiecen a hablar más tarde, que tengan dificultades para formar las oraciones correctamente o que usen el lenguaje de maneras poco comunes para su edad. Esto puede ocasionar dificultades para entender instrucciones sencillas, seguir instrucciones o entablar conversaciones. Algunos niños con TEA pueden incluso tener dificultades para expresar sus necesidades o pensamientos verbalmente, por ejemplo, para entender la diferencia entre «dame la pelota» y «lanza la pelota».
#2 Patrones de habla atípicos
Los niños con TEA pueden comunicarse de maneras únicas. Pueden repetir palabras o frases (ecolalia), usar un lenguaje repetitivo o tener dificultades para entender el lenguaje figurado, como las metáforas o los chistes. También pueden tener un ritmo o una entonación distintivos en su discurso, lo que a veces puede dificultar su comprensión. Además, pueden tener problemas para entender el humor o el sarcasmo.
#3 Contacto visual limitado
Los niños con TEA pueden tener dificultades para hacer contacto visual o mantener el contacto visual. Pueden apartar la mirada con frecuencia, evitar por completo el contacto visual o mirar fijamente pero sin que parezca que se conectan. Esta puede ser un área difícil tanto para los niños con TEA como para sus cuidadores.
#4 Falta de interés en la interacción social
Los niños con TEA pueden mostrar menos interés en jugar con otros niños o en las interacciones sociales. Es posible que prefieran las actividades solitarias y tengan dificultades para iniciar o mantener las señales sociales. Pueden tener dificultades para socializar, leer las expresiones faciales o interpretar el lenguaje corporal.
#5 Falta de juegos de simulación
Los niños con TEA pueden tener dificultades con los juegos imaginativos o de simulación. Es posible que no parezcan interesados en participar en situaciones imaginarias o en entender los roles sociales en los juegos. Es posible que tengan dificultades para entender la diferencia entre lo real y lo ficticio, y es posible que no puedan asumir diferentes roles en un juego imaginativo.
#6 Comportamientos repetitivos
Son comunes los intereses restringidos y los comportamientos repetitivos, como aletear las manos, girar o alinear objetos. Los niños con TEA también pueden tener intereses intensos en los que se centran repetidamente. Pueden adoptar conductas repetitivas para tranquilizarse o controlar la información sensorial. Estos comportamientos pueden ser una forma de generar previsibilidad y comodidad.
#7 Sensibilidades sensoriales
Algunos niños con TEA tienen una sensibilidad sensorial elevada que les causa malestar. Es posible que tengan una fuerte aversión a ciertos sonidos, texturas, olores o sabores. Es posible que se sientan abrumados por las luces brillantes, los ruidos fuertes o los olores fuertes. Estas sensibilidades pueden provocar conductas desafiantes, como la evitación, la agitación o las crisis emocionales.
¿Sabía que los niños y las niñas pueden tener diferencias en los síntomas del TEA? Por ejemplo, si hablamos de niños, estos signos son típicos:
- Habilidades motoras: Los niños con TEA pueden presentar retrasos motores más significativos o movimientos motores inusuales. Esto podría incluir torpeza, dificultad de coordinación o patrones de marcha inusuales.
- Intereses restringidos: Los niños con TEA pueden tener intereses particularmente limitados e intensos, que a menudo se centran en objetos, temas o actividades específicos. Esto puede dificultarles participar en otras actividades o hacer la transición entre tareas.
Y chicas tienen síntomas un poco diferentes:
- Camuflaje social: Las niñas con TEA pueden ser más hábiles para «enmascarar» sus síntomas, adaptarse a las situaciones sociales y parecer que tienen menos desafíos. Sin embargo, esto puede provocar un aumento de la ansiedad y el estrés, ya que intentan cumplir con las expectativas sociales.
- Diferencias de comunicación: Las niñas con TEA pueden tener retrasos en el lenguaje o dificultades de comunicación más sutiles y, a menudo, se centran en expresar sus necesidades por medios indirectos, como la comunicación no verbal o los gestos.
- Ansiedad social: Las niñas con TEA pueden experimentar una mayor ansiedad social y retraimiento en comparación con los niños. Esto puede hacer que les resulte más difícil iniciar amistades o participar en actividades sociales.
Recuerde que, a pesar de los numerosos datos de investigación, todos los niños son únicos y los comportamientos pueden variar.
Navegando por la adolescencia: desafíos únicos para los jóvenes autistas
A medida que los niños con TEA pasan a la adolescencia, pueden enfrentarse a desafíos únicos. Comprender estos desafíos y brindar el apoyo adecuado es crucial para ayudarlos a prosperar durante esta importante etapa de desarrollo.
- Luchas académicas: Los desafíos académicos pueden volverse más pronunciados a medida que los adolescentes aprenden materias que requieren sólidas habilidades de función ejecutiva, como la planificación, la organización y la administración del tiempo. Los planes educativos individualizados (IEP) y el apoyo académico pueden ayudarlos a tener éxito.
- Preocupaciones de salud mental: El autismo a menudo coexiste con la ansiedad y la depresión, que pueden intensificarse durante la adolescencia. Identificar y abordar estos problemas de salud mental es vital para el bienestar de los adolescentes con TEA.
- Planificación de la transición: Prepararse para la vida después de la escuela secundaria es crucial. La planificación de la transición debe comenzar temprano, abordando la educación futura, el empleo, la vida independiente y la integración social.
Comprender el diagnóstico del autismo en niños mayores
Diagnosticar el autismo en los niños mayores puede ser más complejo que en los niños más pequeños. El proceso de diagnóstico implica una evaluación exhaustiva para comprender las necesidades de la persona:
- Evaluación clínica: Un profesional de la salud, con frecuencia un pediatra especializado en el desarrollo o un psicólogo infantil, realizará una evaluación integral y recopilará información sobre el desarrollo, el comportamiento y las interacciones sociales del niño por parte de los padres, maestros y cuidadores.
- Observación directa: El proveedor de atención médica puede observar al niño directamente y evaluar sus habilidades sociales y de comunicación, su sensibilidad sensorial y sus comportamientos repetitivos.
- Evaluaciones estandarizadas: Las herramientas de evaluación estandarizadas, como el Programa de observación diagnóstica del autismo (ADOS) y la entrevista diagnóstica revisada del autismo (ADI-R), pueden ser útiles para determinar un diagnóstico.
- Evaluación médica: Se puede realizar una evaluación médica para descartar otras afecciones médicas que podrían estar causando los síntomas del niño.
Una vez que a un niño se le diagnostica autismo, se puede desarrollar un Programa de Educación Individualizado (IEP) para apoyar sus necesidades educativas. El IEP es un documento legalmente vinculante que describe las metas educativas específicas de un estudiante y la forma en que la escuela lo ayudará a alcanzar esas metas.
¿Por qué es importante reconocer el autismo en los niños?
La identificación e intervención tempranas son fundamentales para los niños con trastorno del espectro autista (TEA). Estas son las razones por las que el reconocimiento temprano del autismo es tan importante:
- Resultados mejorados: Las investigaciones muestran que los programas de intervención temprana, como la terapia de análisis conductual aplicado (ABA), pueden mejorar significativamente los resultados de los niños con trastorno del espectro autista. Estos programas pueden ayudar a los niños a desarrollar lo esencial habilidades de comunicación, habilidades sociales, y cuidado personal.
- Reducción de desafíos: La intervención temprana puede ayudar a mitigar algunos de los desafíos asociados con el TEA, como las dificultades de comportamiento, el aislamiento social y las dificultades de aprendizaje.
- Mayor independencia: Con apoyo temprano, los niños con trastorno del espectro autista pueden aprender estrategias para manejar sus desafíos y aumentar su independencia en la vida diaria.
- Mejora de la calidad de vida: La intervención temprana puede conducir a una mejor calidad de vida para los niños con TEA, lo que les permite participar más plenamente en sus comunidades y alcanzar su máximo potencial.
- Mayor comprensión y aceptación: El reconocimiento temprano puede ayudar a las familias y las comunidades a ser más conscientes y comprender mejor el autismo. Esto puede conducir a entornos más inclusivos para los niños con TEA y reducir el estigma y la discriminación.
Es importante recordar que el enfoque correcto de la intervención variará según las necesidades individuales. Reconocer el autismo en los niños lo antes posible puede marcar una diferencia significativa en sus vidas y ayudarlos a alcanzar su máximo potencial. En Levántate por el autismo, facilitamos el diagnóstico. Ponemos en contacto a su familia con socios de diagnóstico confiables que ofrecen citas rápidas y minimizan los tiempos de espera.
Qué hacer si tiene dudas
Si le preocupa que su hijo pueda tener TEA, es importante que busque orientación profesional. Estas son algunas medidas que puede tomar:
- Hable con el pediatra de su hijo: El pediatra de su hijo puede evaluar los hitos del desarrollo de su hijo y hacer recomendaciones para una evaluación más profunda. Sin embargo, es probable que no sea necesario derivar a un pediatra para que le hagan más pruebas.
- Confía en tus instintos: Como padre, usted conoce mejor a su hijo. Si tiene dudas, no dude en buscar ayuda profesional.
- Reúna información: Obtenga información sobre el autismo y sus signos y síntomas. Hay muchos recursos disponibles en línea y a través de organizaciones de autismo.
- Sea paciente: El proceso de diagnóstico puede llevar tiempo, pero es importante ser paciente y abogar por su hijo.
- Busque una intervención temprana: La intervención temprana puede marcar una diferencia significativa en los hitos del desarrollo y el bienestar de un niño.
Rise Up for Autism: Brindando terapia ABA y servicios de apoyo
Rise Up for Autism se dedica a brindar apoyo, recursos y defensa a las personas con TEA y sus familias. Ofrecemos la terapia ABA para ayudar a los niños con trastornos del espectro autista a alcanzar sus hitos de desarrollo y tener éxito en los próximos pasos de sus vidas.
Si tiene dudas sobre el desarrollo de su hijo o está buscando apoyo para su hijo con trastorno del espectro autista, extender la mano para defender el autismo. Nuestro equipo de profesionales está aquí para guiarlo en cada paso del camino.